La regata se compone de dos Etapas una de 160 millas con salida de Barcelona llegada en Sa Rápita (Mallorca), y una segunda etapa de 650 millas con salida de Sa Rápita y final en Barcelona, regata que sirve a los regatistas en solitario, sumar millas para poder participar en la próxima edición de la MiniTrans.
Tras unos días de descanso hemos podido hablar con Genis Hontoria, quien nos ha contado de primera mano, la experiencia vivida y todos los pormenores, algo que vamos a intentar transcribir a continuación.
La embarcación
LA NONA, es la embarcación en la que Genis ha efectuado la regata, La Nona es un prototipo de última generación, diseñada por Marc Lombard, proyecto que nació y ha sido llevado acabo por la FNOB, para participar en la próxima MiniTrans.
La embarcación salió a concurso para aquellos patrones de la base Mini y que vayan a volver a realizar en la próxima edición de la Minitrans, siendo el elegido el skyper uruguayo Federico Waksman, que finalizo en vigésima posición en la última Minitrans.
Genis forma equipo con Federico, preparando distintos proyectos y regatas, por lo que en esta ocasión Genis ha sido el encargado, de navegar la regata SOLOMED con La Nona, con el fin de ir poniendo a punto la embarcación, ya que, desde su botadura, La Nona no ha tenido prácticamente horas de navegación, y este tipo de embarcaciones requieren de esto, de horas de navegación, con el fin de configurar trimados y solventar los distintos problemas que puedan ir apareciendo.
Preparativos
Este apartado va a ser breve, Genis prácticamente no tiene tiempo para preparar la embarcación y a menos de tres días para que empiece la prueba, la embarcación toca el agua por primera vez y hace sus primeras millas, que sirven a Genis para tomar notas e intentar poner a punto. Todo con el tiempo justo.
1ª Etapa 160 millas náuticas
El 5 de abril se dio la salida a la primera etapa de la SOLOMED 2022, poco viento al inicio de la prueba, pero Genis notaba que el barco era muy rápido y no tardo en coger la cabeza de la flota, todo iba bien, pero como es normal en una embarcación prácticamente está recién estrenada hay que fiabilizar y poner a punto, este era el cometido de Genis en esta regata, hacer millas tanto el barco como el patrón, ir poniendo a punto, y solucionar los inconvenientes que puedan aparecer durante la regata. Por ello cuando la braza del Spy se rompió, hubo que hacer bricolaje a bordo, la flota todavía próxima a La Nona, supero su posición hasta que se realizó la reparación y poco se tardo en coger la cabeza.
El barco responde bien y navega rápido las sensaciones para Genis son muy buenas, pero sabe que tiene que estar alerta, este tipo de regatas no dan tregua y como ya hemos comentado con un barco nuevo, es inevitable que puedan seguir apareciendo algún que otro inconveniente, como la rotura de la contra del botalón que obligaba a una nueva parada.
En algún momento, debido a estos incidentes, el candelero de proa salta parcialmente y hace un agujero, que obliga a Genis, a tener que achicar agua cada hora. Para aquellos que no estamos acostumbrados, puede resultar que sea una catástrofe, pero para navegantes como Genis, son gajes del oficio a los que ya se esta preparado para solventar y poder seguir en regata.
Quedaba poco para llegar menos de 40 millas, y uno de los obenques bajos, se soltó, con la fortuna que Genis maniobro con rapidez y pudo dar solución para afrontar las últimas millas, que iban a llevar a requerir de Genis, la máxima concentración, porque en esa zona de Mallorca los vientos se encañonan y no se podía correr ningún riesgo con la embarcación, en cualquiera de las muchas cargas de las rachas de viento.
Al final, todo acabo perfectamente cruzando la línea de llegada en primera posición. El balance de la primera etapa ha sido muy positivo para Genis, ya que ha navegado con una embarcación muy rápida y con vientos de través entre 15 y 20 nudos, que ha permitido disfrutar pese a los pequeños inconvenientes.
Tras unos días de descanso, vuelta a la rutina del trabajo que nos da de comer, Genis hace lista de temas que hay que solventar para la segunda etapa.
Con todo planificado, una llamada de la organización avisa a la flota que la salida se va a adelantar 24 horas para evitar un frente que amenazaba con fuertes vientos.
2ª Etapa 650 millas náuticas
Prácticamente sin tiempo para poner a punto la embarcación y gracias a la ayuda de alguno de los navegantes de Base Mini de Barcelona, La Nona pudo estar a punto para la salida.
Como ya se informó a la flota, se dio la salida de la segunda etapa con 24 horas de adelanto.
El cansancio acumulado de la primera etapa era un hándicap que ya asumía Genis, por lo que empezó a navegar e intentar sacar el máximo partido de la embarcación, optimizando los trimados en cada rumbo. Pronto cogió la cabeza de la flota, pero las distancias eran mínimas, entre Mallorca e Ibiza, entró una borrasca que dio para todo, encalmada, viento de norte muy racheado, calma y viento de sur. Genis conocedor de la zona, intento sacar el máximo provecho de las circunstancias e intento marcar distancias entre sus perseguidores, algo que no logró hasta casi pasar Formentera.
La vuelta de Ibiza a Mallorca, fue otra cosa, ya que fue todo de ceñida con mucha ola y con vientos de 25 nudos, lo que no permitía prácticamente descansar.
La organización avisó a la flota de posibles cambios en los recorridos, incluso también la posibilidad de acortar la prueba a su paso por Sa Rápita, pero antes de llegar a este punto, la organización informó a la flota que el recorrido se modificaba, eliminado el paso por Columbretes y rodeando Mallorca, pasando por la puerta de Formentor, y de ahí rumbo a Barcelona, siendo este último tramo, el más duro, debido a los 30 nudos de viento de popa que llegando a Barcelona paso a ser de proa acabando en ceñida.
Genis que había roto el genaquer, tubo que gestionar los rumbos abiertos con el Spy, con el fin de mantener la diferencia con sus perseguidores, que de 15 millas antes de llegar a Formentor, paso a ser de 6 millas en la baliza de próxima a Badalona que marcaba el último tramo a la llegada. Y así fue, aunque quedaba el último tramo, ya con la noche y con las luces de costa, todo se hacia bastante complicado identificar las marcas, sobre todo cuando en una ida de orzada en medio del canal, el barco escoró demasiado perdiendo la antena y el equipo de viento, por lo que no hubo posibilidad de navegar con la electrónica.
A las 23:37:33 del 19 de abril, La Nona y Genis cruzaban en primera posición la línea de llegada en Barcelona, toda una aventura y un éxito que marca de que pasta está hecho nuestro ilustre navegante del que todos debemos sentirnos orgullosos de que tenga su corazón en el Club Náutico de Villajoyosa.
El próximo reto de Genis, será junto a Fede, en la regata Mare Nostrum, pero eso será otra historia.
